Contando con un día muy cálido y soleado, salimos por el día a la aún poco visitada meseta de Altos de Chicauma. En las zonas bajas, las roblerías todavía mostraban algo de sus colores otoñales, mientras más arriba predominaba la abundante nieve del último temporal. Una vez que salimos a la meseta superior, nos encontramos con la Laguna del Inca cubierta de nieve profunda. Pudimos avanzar con mucho esfuerzo hasta un promontorio, en donde nos detuvimos a contemplar la inmensidad de Los Andes. Durante la bajada hubo uno que otro resbalón en la nieve, pero sin consecuencias.