Subimos con un excelente clima en grata compañía 18 socios y amigos del DAV, cumpliendo los itinerarios fijados. 17 participantes llegamos a la cumbre para observar la belleza de la vista que nos regala el Cerro El Durazno, además logramos ver un par de cóndores sobrevolando cerca del filo. En relación al acceso, el segundo portón después del puente, estaba abierto lo que nos facilitó el llegar con los autos a la base del cerro. Gracias a esto, ahorramos tiempo y energía, que nos sirvió para utilizarla posteriormente en el ascenso por la canaleta. La cumbre estaba agradable, no corría viento, el sol nos acompañaba para poder disfrutar de un merecido descanso, almuerzo, conversación y de las sesiones fotográficas de rigor. Un día “redondito”!!