Objetivo: Cerro San Simón

El San Simón, es uno de los cerros olvidados del sector de Lo Valdés. Durante los años 60 era reconocido dentro de las mejores alternativas de cerro en el sector. Sin embargo, con el paso de los años comenzó a quedar en el olvido y solo hace un tiempo es visitado nuevamente por los montañistas. Consciente de aquello, se eligió esta ruta. La aproximación, es por un sendero que sube por la ladera que se encuentra detrás de la “torta de acopio” antes del sector de Las Amarillas. Subimos en dirección al portezuelo que se ve al fondo, por el filo que lleva hasta él. A poco andar, está el monolito que recuerda a montañistas fallecidos en un accidente en el Retunbadero. Luego de alcanzar el portezuelo, tenemos una vista de la quebrada el Yesillo sin nieve. Desde este punto la huella es evidente, pero más adelante hay algunas partes borradas. Mantenemos la cota, tomando el final de la quebrada como referencia, lugar done montamos nuestro campamento base a unos 2800 msnm. al límite del terreno nevado. Para la segunda jornada, el pronóstico del tiempo no es bueno, por lo que salimos temprano del campamento. Continuamos el ascenso por la quebrada que tuerce hacia la derecha, llegando a una gran planicie. El viento aumenta y la temperatura comienza a bajar en forma importante. En este punto ya hay una gran acumulación de nieve, por lo que comenzamos a turnarnos para abrir huella. En un comienzo la pendiente es suave, pero a medida que avanzamos, la pendiente y la profundidad de la nieve va en aumento. Tras unas horas de lenta y dificultosa marcha, alcanzamos la canaleta que tiene unos 40 grados de inclinación. La superamos con dificultad debido a la gran cantidad de nieve acumulada. Aún no se visualiza la cumbre del San Simón, ésta se encuentra tras el filo de la derecha. La ruta continúa en dirección Oeste, la profundidad de la nieve aumenta aún más y la temperatura sigue bajando. Por lo avanzado de la hora, es momento de evaluar si continuamos a la cima, aún nos quedan unas horas para alcanzarla. Se decide emprender el largo regreso debido a la hora y lo lento de la progresión. En otra ocasión, repetiremos esta experiencia para seguir disfrutando de la montaña y de esta entretenida y hermosa ruta. Hasta una próxima salida!