Excelente grupo y magnífico día de sol, con inmejorables vistas a la Cordillera de Los Andes completamente nevada y en particular al Aconcagua. Aún quedaban robles rojos y cerca de la cumbre había nieve en el camino. Al retorno, comimos kuchen y café de grano donde la Sra. Inge, entre Caleu y la Cuesta La Dormida.