Después de tomar el andarivel muy temprano caminé hasta Piedra Numerada, luego continúe hasta la cascada, luego seguí hasta el refugio Federación, con una vista espectacular del glaciar del plomo, valió la pena el esfuerzo. El regreso fue muy cansador para mi, cada bajada que había sido muy grata en la mañana se trasformaron en una eternidad remontarlas al regreso y como era muy tarde no alcancé a tomar el andarivel y tuve que seguir caminando y finalmente llegue al auto.